El Estatus de Protección Temporal (TPS) es una protección migratoria otorgada a ciudadanos de ciertos países que enfrentan situaciones de emergencia como conflictos armados, desastres naturales o condiciones que impidan su retorno seguro. En el caso de Venezuela, debido a la situación política, económica y social del país, el gobierno de Estados Unidos ha concedido el TPS a los venezolanos, permitiéndoles permanecer y trabajar legalmente en EE. UU. durante un tiempo determinado.

1. Nacionalidad venezolana: Debes ser ciudadano venezolano o, en ausencia de la nacionalidad de cualquier estado, haber residido habitualmente en Venezuela.

2. Fecha de ingreso: Haber estado presente en Estados Unidos a la fecha en que se designó a Venezuela para el TPS.

3. Permanencia continua: No haber salido de Estados Unidos desde la fecha de su designación al TPS sin un permiso previo.

4. No tener antecedentes penales: No haber sido condenado por ningún delito grave ni por dos o más delitos menores en Estados Unidos.

5. Pagar las tarifas correspondientes: Cubrir los costos asociados a la solicitud del TPS y el permiso de trabajo.

• Permanencia en EE. UU.: Te permite permanecer en Estados Unidos sin temor a ser deportado.

• Permiso de trabajo: Otorga un documento que permite trabajar legalmente en Estados Unidos.

• Viaje al extranjero: Con ciertas restricciones y con la aprobación previa, podrías tener la posibilidad de viajar fuera de Estados Unidos y regresar.

Importante: El TPS es un beneficio temporal y no conduce directamente a la residencia permanente (Green Card) o a la ciudadanía estadounidense. Sin embargo, no impide solicitar otros beneficios migratorios.

Debido a la naturaleza cambiante de las políticas migratorias, es esencial estar al tanto de las fechas límites, las renovaciones y los posibles cambios en los criterios de elegibilidad. Como siempre, contar con la asesoría de expertos o abogados especializados en inmigración puede facilitar el proceso y garantizar la precisión en la solicitud.